EL VALOR DE CRECER
El hombre ha nacido para alcanzar la vida
y todo – desde el momento mismo del nacimiento – depende de él.
Puede desperdiciarla, puede seguir respirando, seguir comiendo, seguir envejeciendo, puede seguir caminando hacia la sepultura… Pero esto no es vida. Cualquier animal puede envejecer; crecer es la prerrogativa de los seres humanos…
Sólo unos pocos reclaman este derecho. Crecer significa sumergirse en cada momento más profundamente, hacia el principio de la vida; significa alejarse cada vez más de la muerte, no ir hacia la muerte. Cuanto más ahondas en la vida, más comprendes la inmortalidad en tu interior, más te alejas de la muerte go to my site.
Llega un momento en que puedes ver a la muerte en cosas cotidianas, a veces no es otra cosa que un cambio de ropa,
un cambio de casa, un cambio de formas. Pero nada muere, nada puede morir. La muerte es la ilusión más grande que existe.
Para crecer, simplemente observa un árbol. A medida que crece hacia arriba sus raíces lo hacen hacia abajo, cada vez más hondo. Hay un equilibrio. Cuanto más se eleva el árbol, más profundamente penetran las raíces.
No puedes tener un árbol
de cuarenta y cinco metros de altura
con raíces pequeñas:
no podrían sostenerlo.
En la vida, “crecer” significa
crecer en profundidad dentro de ti;
es allí donde están tus raíces.
OSHO
(Orador, filósofo y maestro espiritual hindú, autor de “Del sexo a la superconsciencia” (1968), “Amor y meditación” (1974), “El libro de los secretos” (1974), “Tantra: el entendimiento supremo” (1975) e “Iluminación: la única revolución” (1976).)