Cuándo solicitar Ayuda Profesional
Existen muchas maneras al pedir una primera cita con un Psicólogo/a. Hay personas que demandan ayuda con una gran naturalidad y confían abiertamente en la figura del profesional a quien se la solicitan. Saben que los Psicólogos pueden brindar ayuda ante un abanico enorme de problemas y dificultades que acontecen en la vida de las personas. Normalizan el acudir a un Psicólogo para mejorar su calidad de vida y obtener ayuda de manera fácil.
En nuestra sociedad la figura del Psicólogo va desprendiéndose de etiquetas estigmatizadoras vergonzosas como “locura“, “dependencia“, o “tener problemas“. Poco a poco la personas saben que existen profesionales dispuestas a ayudarles y que no es nada malo.
Comprendemos que hay personas para las que acudir a un Psicólogo es una decisión importante, compleja y que puede estar retardada por diferentes circunstancias.
Queremos transmitir que todas las diferentes maneras de llegar a la consulta de un Psicólogo son válidas y comprendidas por quienes les tratan.
Identificamos tres grandes grupos:
- Aquellos que se preguntan si la intensidad de su sufrimiento es suficiente para acudir a un profesional o bien “ya se les pasará“.
- Otras personas reconocen el sufrimiento como consecuencia de una circunstancia vital trágica: una separación, un duelo, un despido, mobbing laboral, etc.
El tiempo es para ellos un elemento sanador.
Sin embargo, nuestra experiencia nos demuestra que en ocasiones dejar pasar el tiempo no es suficiente, no ayuda a la cicatrización de las heridas emocionales si no hay una “elaboración” previa de la causa de su sufrimiento.
Este hecho es por tanto fácilmente evitable.
Pero comprueban que el hecho de saber cosas con la cabeza no acalla ni alivia el sufrimiento.
Hay otro grupo que espera hasta la aparición de los primeros síntomas que alertan hacia una descompensación de su bienestar emocional.
Existen múltiples maneras de acudir a un Psicólogo profesional y es importante confiar en su capacidad de ayuda.
Sólo el hecho de intentarlo ya es un gran salto.